Hoy en día, nuestro ingeniero agrónomo y gerente de ventas en Serbia, Aleksandar Kurjakov, habla sobre la gran diversidad de las condiciones climáticas y del suelo en el sudeste de Europa, que crean oportunidades prometedoras para experimentar productos.
“El sudeste de Europa (SEE), especialmente la parte balcánica, es muy variable en términos de factores edáficos y climáticos. En algunas regiones continentales la temperatura puede variar durante el año desde -30˚C hasta +40˚C; por el contrario, existen regiones donde el clima es moderado debido al mar Adriático y se cultivan variedades subtropicales. Los suelos van desde los más fértiles de Europa, como el chernozem – suelos negros muy ricos en materia orgánica y nutrientes disponibles, hasta los erosionados”.
Además, la Península Balcánica es uno de los centros mundiales de biodiversidad, gracias a su era geológica, su geomorfología, sus condiciones climáticas y, en particular, por su función de refugio de varias especies durante los períodos glaciares. Por ejemplo, más del 40% de las plantas vasculares europeas se encuentran en Serbia.
“Naturalmente, la producción agrícola también es muy diversa, variando desde la producción de cultivos herbáceos en el Danubio y la cuenca del Pannon, seguida de viñedos y modernos huertos intensivos en zonas montañosas de los Balcanes occidentales, hasta la producción de hortalizas en campo abierto en las zonas del sur de la región de los Balcanes. En conclusión, en una región relativamente pequeña existe una gran variedad de climas, suelos y cultivos, lo que hace que esta parte de Europa sea ideal como campo de pruebas para nuevos fertilizantes de especialidad y bioestimulantes”.
“Mi anterior trabajo como investigador y profesor asistente en la Universidad de Novi Sad me ayudó a vincular a Van Iperen con una amplia red académica y de investigación entre varias universidades, institutos de investigación y centros agrícolas gubernamentales en el sureste de Europa. Esta red ha demostrado ser muy valiosa para probar nuevos productos de nuestra gama de Soluciones de Alto Rendimiento en diferentes cultivos y con diferentes factores abióticos”.
Por otra parte, los agricultores locales dependen más de los datos recopilados en ensayos realizados en las mismas o similares condiciones edáficas y climáticas con las que están más familiarizados, que también se refieren a variedades, clones e híbridos cultivados localmente. “Sin embargo, consideran que estas instituciones son fuentes de información independientes e imparciales, lo que nos brinda una gran oportunidad en el posicionamiento de los productos probados y en el marketing estratégico”.
“Me gustaría dar un ejemplo ilustrativo de las líneas anteriores. Los ensayos de Iperen WAKE-up® Liquid se llevaron a cabo en esta región durante 2017 y 2018, los cuales han mostrado extremos climáticos; 2017 fue muy seco y caluroso, mientras que 2018 se presentó con un clima templado y lluvioso por encima del promedio. En ambos extremos nuestro producto ha demostrado sus mejores prestaciones, aumentando el rendimiento y la calidad de los cultivos ensayados. Todo ello condujo a la apertura de nuevos mercados para el producto y al aumento de las ventas en 2019, ya que sus prestaciones y calidad fueron reconocidas por los agricultores gracias a los datos de la prueba”, concluye Aleksandar.